Electricista Matriculado las 24 horas
Lo usás a diario, te saca de apuro a la hora de calentar algo rápido y claro, también se ensucia. ¿Sabés cómo limpiar un microondas? Quedate y leé…
Lógicamente la cantidad de suciedad que tenga un horno microondas dependerá del uso que hagamos de él y de su mantenimiento. La mayor parte de la suciedad suele provenir de la comida dejada por demás calentando, que empieza a salpicar.
Si nos dejamos estar demasiado con la limpieza del microondas, puede que llegue a afectar su funcionamiento. Además, no olvidemos que allí calentamos cosas que luego ingerimos, por lo cual dejar restos de comida puede ser un caldo de cultivo de bacterias y otros microorganismos que nos pueden dañar.
Así que no se diga más. Tomémonos unos minutos y limpiemos el microondas para que quede impecable y perfumado, como nuevo!
Tenemos algunas variantes para el preparado desengrasante (y ecológico) que hará toda la magia. Podemos exprimir un limón o cortarlo por la mitad. Luego, colocar el jugo o las dos mitades del limón en un recipiente con 300 ml de agua. Agregar un poco de bicarbonato de sodio o una rama de perejil, lo que tengamos a mano.
Una vez listo el preparado, lo colocamos en el microondas y lo ponemos a calentar durante 5 minutos a máxima potencia. El líquido se irá evaporando y empañando todo el interior del horno, lo que aflojará la grasa o restos pegoteados. Finalizado el tiempo, retiraremos el recipiente y removeremos la suciedad con un trapo.
Tanto el vinagre como el jugo de limón son poderosos desengrasantes orgánicos, por lo cual este segundo método es muy similar al anterior, solo que lógicamente, reemplazaremos el limón con vinagre. ¿Cómo? Colocando una cucharada sopera de vinagre blanco en un recipiente con 300 ml de agua. Luego lo colocaremos entre 3 y 5 minutos a calentar en el microondas. Finalizado ese tiempo, retiraremos los restos de comida con un trapo. Si quedan restos de olor (de mal olor de la suciedad, no del vinagre), podemos repetir la acción, agregando bicarbonato de sodio.
Si nuestro microondas viene con bandeja giratoria, ésta, así como el aro y las rueditas que la complementan, también se ensucian y por ende, deben limpiarse. Esto es muy sencillo y no lleva ningún secreto: retiraremos ambas partes del interior del microondas y las lavaremos como cualquier otra pieza de vajilla.
Si tenés lavavajillas, seguramente tendrás a mano un poco de su jabón. Lo bueno de este producto es que no es corrosivo, a diferencia de otros desengrasantes artificiales. Calentaremos un recipiente con agua tibia y una cucharada del jabón de lavavajillas durante solo un minuto. En este caso, a diferencia de los anteriores, humedeceremos una esponjita en el preparado y la pasaremos por el interior del microondas.
El bicarbonato de sodio es el santo remedio para muchas finalidades. Una de ellas es limpiar el microondas. Así como lo incluimos como complemento de los métodos anteriores, en este caso lo usaremos solo, aplicándolo sobre una esponja húmeda para luego limpiar tanto el interior como el exterior del artefacto.
Si bien casi todos los métodos que te hemos compartido son inocuos, puede que prefieras no utilizar nada más que agua. Te sugerimos que coloques un trapo en un recipiente con agua y lo calientes en el microondas durante 3 minutos.
Luego, con el mismo trapo, podrás remover la suciedad. ¿Qué ocurre aquí? Que lo que hicimos primero fue hidratar la suciedad pegada. De esta manera, es como si volviéramos al momento en que era “suciedad nueva” y es más fácil de remover.
El mantenimiento de nuestros artefactos eléctricos, también hace a un mejor funcionamiento de la instalación eléctrica toda.
